Capítulo 52
Capítulo 52
Neo fue torturado un buen rato antes de lograr escapar de Nerea. Miró con furia contenida a su tio, que lejos de ayudarlo, se regodeaba en su desgracia, y le susurró a Nerea al oído, ¡No puedes favorecer al tio! ¡Si el tio es mayor que yo, su castigo debe ser más severo!
Nerea, viendo lo rápido que Neo se había vuelto contra ella, pensó que definitivamente la relación entre los dos era de lo más frágil. Sin embargo, no tenía intenciones de dejar a Roman sin recibir su merecido.
Con una sonrisa maliciosa y sin intentar ocultar su diversión, se acercó a Roman.
-Señor Roman…
-¿Tienes hambre?
Ella todavía no había dicho nada, pero Roman se adelantó. Material © NôvelDrama.Org.
Aunque no se habia sentido hambrienta hasta el momento, la mera mención le hizo recordar lo irritada que estaba después de lidiar con Neo, y el partido que habían jugado por más de media hora, haciéndole notar ahora el vacio en su estómago…
Espera, jesto tiene que ser una trampa! ¡No podía caer tan fácil!
No, I
, no tengo hambre. ¡Nada de hambre!
Roman: -Yo cocinare.
¿Qué?
Nerea casi no podía creer lo que oía, -¿Tú… sabes cocinar?
-Señorita Nerea, lo que usted no sabe es que el Sr. Roman no solo sabe cocinar, sino que es un verdadero maestro en la cocina. Es una lástima, solo he tenido el placer de probar su comida una vez, durante el cumpleaños número 30 de la señora, y solo fue un plato, pero fue inolvidable. Desafortunadamente, nunca volvi a tener ese honor.
El mayordomo, recordando aquel momento, parecía revitalizado.
Al oir esto, Nerea se sintió aún más intrigada.
¡Quién lo diría! El antes imponente Roman, heredero de Dazz y ahora máxima autoridad de la Torr Gemela Dazz, ¡sabía cocinar!
Ella siempre había tenido un punto débil por los hombres que sabían manejarse en la cocina, y má si se trataba de alguien tan atractivo como Roman. La idea de probar su comida era muy buena…
Nerea dudó, tentada.
Neo, viendo cómo ella se dejaba llevar por la promesa de un buen plato, la jaló del borde de su camisa -Nerea, ¿ya no vas a castigar al tio?
Ya había logrado tenderle una trampa a este astuto magnate, y quizás no tendría otra oportunidad como esta. ¡No podía dejarlo escapar tan fácilmente!
-Si cocinas para mí, tal vez considere no castigarte de una manera tan terrible como lo hice con Neo.
-De acuerdo.
Le respondió sin dudar, aunque a Nerea le dio un poco de vergüenza. Ya había aceptado tan fácilmente,
1/2
Capitulo 52
¿no sería demasiado abusar de su buena voluntad?
Mientras lo observaba, recordó aquella noche en el Hotel del Río, las escenas que aceleraban el pulso y que habían quedado grabadas en su memoria, especialmente su fisico y fuerza, sus abdominales y músculos bien definidos… Con semejante figura, seguro mantenía una rutina de ejercicio rigurosa, ¿no? -Entonces hagamos algo sencillo. ¡Haz flexiones!
-¿Cuántas?
Nerea pensó por un momento y levantó un dedo, no quería que gastara mucha energía antes de cocinar. -Cuando termines, tienes que decirme: ¡Nerea, eres increible! ¡Te admiro tanto!
Poniendo sus manos sobre el pecho, imitó una expresión de admiración. Al oir la palabra admirar, un destello pasó por los ojos de Roman, -Está bien.
Neo, a un lado, puchereó insatisfecho, -Nerea, jsiempre eres injusta, el castigo para el tio es muy simple!
-¿Qué se le va a hacer si él puede usar sus habilidades en la cocina para convencerme?
Dijo Nerea, siguiendo a Roman hacia el área de ejercicio, solo para verlo quitarse la corbata y… jempezar a hacer flexiones con una sola mano!
¿Así de intensos eran sus entrenamientos?
Pero bueno, hay que admitirlo, verlo ejercitarse sería un espectáculo.
14-10